Ahora una terapia alternativa

Y diréis a que se refiere, pues a una señora que dice que hace terapias alternativas, bueno una curandera que se llamaba antes, o no se, a ver dice que te alinea las energías que te las recoloca.

Decidí ir a esta mujer por la desesperación y por recomendación de alguna persona que le va de maravilla, y bueno solo cobra la voluntad con lo cual no te estafa etc etc.....

Bueno pues haya que me fui, te recibe con un par de besos, te sienta en la sala de espera......

Y pasas a una salita en la que hay una mesa escritorio pegada a la pared, en la que hay dos sillas juntas, en una se sienta ella y en otra te pide que te sientes tu, hay también un hombre muy serio detrás sentado a los pies de una camilla, ella se pone de frente a ti y te pide que le digas porque estas allí, te cuenta lo que hace, que ella ni es vidente, ni es curandera, que solo pone en su sitio las energías que se mueven por nuestro cuerpo.

Me pregunta si quiere que me trate, le digo que si, me pregunta la medicación, me dice que ella no es quien para decirme que la deje pero que todo lo que mandan los psiquiatras son venenos para el cuerpo además que la profesión de psiquiatra es la mas cómoda del mundo porque si te va bien la medicación genial y sino te suben la dosis hasta que te dejan grogui.

Me dice que me va a mirar las energías y cierra los ojos, y empieza a hacer movimientos con las manos, a veces como si estuviera pasando hojas de un libro, y me va diciendo, tienes la energía muy ladeada con respecto al cuerpo, me va diciendo, mira el dolor del pecho no tiene nada que ver con el corazón, tu corazón esta bien, los riñones también, el hígado, mientras va pintando en una hoja de papel, en la que ha puesto mi nombre y mi datos personales como edad, altura y peso, unos dibujitos, esta todo bien lo que pasa es que con la ansiedad tienes la energía que no coincide con su cuerpo, ahora túmbate en la camilla que te voy a intentar recolocar la energía.

Te tumbas, el hombre se frota las manos, te las pone en los tobillos, y ella empieza a tocarte partes de tu cuerpo y ha hacer movimientos con las manos encima de ti. 10 minutos después mas o menos te dice que te levantes, que seguro que te sientes algo mareada en este momento y en unas horas después que es debido a la recolocación de la energía, cojo  mi bolso y me dice son 40€, ZAS!!! COÑO con la voluntad, en fin le digo que solo tengo 30€ (es lo que pensaba darle), me dice que me lo apunta para la próxima sesión serán 50€.

Me cita para la semana siguiente.

Yo voy tengo que darle un voto de confianza a la gente que me dijo que les había ido tan tan bien, era gente de mi entorno y del entorno de mi suegra que no tenían porque mentir.

Voy, me hace lo mismo, me dice que ya tengo la energía mucho mejor, me tumba en la camilla, esta vez no esta el hombre de las manos calientes, me dice que es lo que me da miedo, le digo que conducir por carretera, me dice que visualice y experimente la sensación que tengo a la hora de ir al volante por la nacional, y que luego tengo que ver una pelota grande roja en mi tripa, que se convierte en una roja mas suave y mas pequeña que esta en mi pecho y que luego se convierte en una blanca en mi frente y desaparece. Esto me lo hace repetir 3 veces, las bolas van cambiando de colores, creo que era azul y la otra no me acuerdo, luego me dice que tengo que adelgazar ("que mas quisiera yo por dios si siempre estoy a dieta"), que visualice mi reflejo en un espejo en el cual tengo la figura que deseo y con la ropa que me gustaría llevar, me dice que le diga como voy vestida y me dice que con esa imagen me tengo que quedar que me ayudara a perder peso, me levanto, cojo el bolso y me dice son 50€ que me debías 10 de la semana pasada, le doy los 50€.

Ya no volví a ir, pero una cosa tengo que decir en su favor, el ejercicio que me hizo de visualizar el miedo que me da conducir por la carretera y el hablarme tranquilamente, y volver a experimenta el miedo si que en ese momento me tranquilizo bastante mucho mas que la terapia con la psicóloga.

No volví porque no podía ir cuando yo quería dado que estaba lejos de mi domicilio y dependía de que me llevaran.

No se si volveré a ir a alguna sesión con ella, la verdad que me daba mucha tranquilidad el escuchar su voz, pero yo sabia que los medicamentos no podía dejarlos como ella me aconsejaba, además eran con lo que de momento podía hacer vida un poco normal de momento.






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